La tasa de éxito de los implantes dentales es de un 98%, y es así tanto con el primer implante colocado como con el segundo. Es por ello que, aunque el primer implante fracase, habría muy pocas probabilidades de que el segundo también lo hiciera. Sin embargo, no puede descartarse que pueda ocurrir. Un implantólogo con experiencia, sabrá hasta qué punto es relevante re intervenir o re plantear el caso, modificando el plan de tratamiento.