La cirugía de colocación de un implante, tiene una duración aproximada de 30 minutos, aunque este tiempo puede variar en función de la complejidad del caso. Por ejemplo, el proceso será más rápido y sencillo si hay suficiente cantidad de hueso. En el caso de que el paciente no cuente con una cantidad de hueso que garantice la colocación del implante, se debe realizar el injerto durante la intervención. Las fases de las que consta la cirugía son las siguientes:
Anestesia
Las intervenciones se deben ejecutar en el pabellón de cirugía menor, de una clínica odontológica y normalmente mediante anestesia local. Sin embargo, hay algunos casos en los que se podría necesitar sedación consciente, con el apoyo de un médico anestesista.
Incisión
Se realiza un pequeño corte en la encía para posteriormente levantarla y poder acceder al hueso.
Fresado y colocación del implante
Para hacer la cavidad en el hueso donde se va a colocar el implante se utilizan fresas quirúrgicas y se instala la fijación de titanio.
Sutura
Se cierra la herida con puntos para proteger la zona en la que se ha practicado la cirugía. La sutura se retira aproximadamente a los 7-10 días.